Actualizado 5:45 P.M. (hora local) La Habana, lunes 26 de mayo de 2008. Año 12 / Número 147
SONIA SÁNCHEZ
sonia.sh@granma.cip.cu
La presidenta de la Federación Internacional de Asociaciones de Bibliotecarios y Bibliotecas (IFLA), partió de Cuba la pasada semana luego de una breve visita en que sostuvo un intercambio con profesionales de la rama de distintas instituciones de la capital y la dirección de la Biblioteca Nacional José Martí, a quienes les expresó su satisfacción por el trabajo que realizan en aras de llevar los conocimientos que atesoran a la población cubana.
"Es importante que las bibliotecas se involucren en todos los ámbitos de la vida", dijo Claudia Lux (nacida en 1950 en Gladbeck, Alemania), quien durante dos años (1974-1976) estuvo en China con una beca del DAAD (Servicio de Intercambio Académico Alemán) y en 1985 se doctoró en Bochum en sinología.
A propósito del tema destacó que entre los objetivos de IFLA se encuentran el fomento de la preparación de los bibliotecarios, desarrollar directrices internacionales para las bibliotecas públicas, conservación de fondos, planes junto a la UNESCO y "actualmente trabajamos en la digitalización". Enfatizó, además, en que la organización que dirige se esfuerza porque los gobiernos nacionales y locales "se concienticen en el rol tan importante que tienen las bibliotecas en la sociedad".
"Mi tarea como presidenta de IFLA es ubicarla hacia una nueva dirección y un tema que escogí al asumir el cargo fue hacer que las bibliotecas formaran parte del día a día de las personas".
Claudia Lux, quien fue directora de la Biblioteca del Senado y en 1997 directora general de la Biblioteca Pública Central y Regional de Berlín, precisó que IFLA "es una organización independiente no gubernamental sin fines de lucro, vivimos sobre todo de las contribuciones de los miembros, y nuestra tarea principal es apoyar a profesionales de todo el mundo, somos de la opinión de que nosotros representamos a nuestros usuarios".
"Tenemos actualmente 1 600 miembros de alrededor de 150 países. Personas privadas pueden asociarse a IFLA, pero no tienen los mismos derechos que las asociaciones y los bibliotecarios".
Señaló también que la entidad internacional tiene más de 46 secciones, entre estas, una responsabilizada con la catalogación, mantenimiento y conservación de fondos; otra dedicada a las bibliotecas infantiles; al fomento de la lectura; la digitalización y una para la zona de América Latina, Centro América y el Caribe que trabaja en promover el entrenamiento y preparación de los bibliotecarios en la región.
Al término del encuentro comentó a Granma: "Pienso que en estos momentos se observa aquí un gran interés en los bibliotecarios por perfeccionarse, es evidente que hay claridad acerca de la formación y superación del bibliotecario con respecto a los nuevos medios. Precisamente he visto aquí en la Biblioteca Nacional muy buenas iniciativas".
Sobre el reto que representa para las bibliotecas en el mundo la irrupción de las nuevas tecnologías observó: "Yo misma formo parte del grupo de trabajo que elabora los lineamientos para la digitalización, pues considero esta un labor muy útil".
Al abundar sobre el asunto recordó las experiencias en África, China, India: "Nos han demostrado cómo precisamente al digitalizar, al hacer independiente del libro físico la información, es que las personas pueden tener acceso más libre y amplio al conocimiento".
"Esto es muy provechoso, por ejemplo, para personas a las que no les es posible realizar largos viajes, pero es una oportunidad también para el país, pues puede presentar su cultura y conocimiento ante todo el mundo".
No hay comentarios.:
Publicar un comentario